Misil Orión

El Misil Orión es una poderosa arma diseñada por Bruce Banner y desarrollada por el ejército de los Estados Unidos. Decididos a probarla antes de incorporarla a su arsenal, los militares tuvieron ocasión de probarlo a pequeña escala cuando Hulk fue capturado y encerrado en la base militar donde se almacenaba un prototipo del Misil. Como era de esperar, el coloso esmeralda escapó de su encierro y se dispuso a escapar, fue entonces cuando el militar al mando de la base, el General Ross, ordenó que dispararan el Misil Orión contra el gigante de jade, el arma, programada para explosionar a treinta metros de su objetivo, generó un anillo de energía iónica que alcanzó de lleno a Hulk derribándolo, aunque no logró dañarle lo suficiente para detenerle y Hulk escapó finalmente, aunque el poder del arma había quedado sobradamente probado y los militares decidieron continuar con los experimentos.

Por desgracia, la exhibición del Misil Orion había sido presenciada por un espía al servicio del Imperio Secreto que envió su informe a sus superiores que decidieron hacerse con tan poderosa arma, para lo que ordenaron uno de sus operativos, Bumerang, que robara el cohete. El villano secuestró a Betty Ross, la hija del General "Trueno" Ross, con la esperanza de usarla como moneda de cambio y ordenar al ejército que le entregara el arma, sin embargo su plan fue abortado por Hulk que cuando vio a Betty en manos del criminal, luchó salvajemente para liberar a la chica, finalmente Boomerang hubo de soltar a su rehén para poder escapar.

Pero nada de esto sabía Ross, que reunió a la mayor parte de los soldados de la base para rescatar a su hija dejando el cuidado del Misil en manos de Glenn Talbot. La ausencia de parte de la guardia representaba una oportunidad que Bumerang no estaba dispuesto a dejar pasar y el villano atacó la base, obligando a Talbot a dar la orden de trasladar el Misil Orion a lugar seguro, sin saber que el agente del Imperio Secreto les estaba esperando y tras derrotar a los soldados, se dispuso a hacerse con el cohete, sin embargo Talbot distaba mucho de estar derrotado y amenazó con volar el Misil antes que entregárselo a Bumerang, comprendiendo que el militar hablaba en serio, el villano abandonó la base.

Comprendiendo que la base militar había dejado de ser segura, los militares ordenaron el traslado del Misil Orión a la base de Cabo Kennedy, donde tendría lugar la última prueba, un vuelo de diez minutos desde la base de misiles hasta el Océano donde explotaría sin causar daño pero permitiendo al ejército comprobar su fiabilidad. Lo que ninguno sabía es que un agente comunista, el espía conocido como Gorki, había recibido órdenes de sabotear el arma provocando el mayor número posible de víctimas por lo que alquiló un piso frente a Cabo Kennedy, y fabricó (o se hizo) con un robot dotado de gran fuerza, y armado con un rayo capaz de desbaratar los sistemas de dirección del Misil.

El espía ocultó el robot en un remolque y después puso un anuncio en el periódico donde ofrecía su vehículo a aquellos que quisieran viajar al norte. Al anuncio respondió Rick Jones, que buscaba viajar a Nueva York puesto que había oído las noticias que Hulk se encontraba allí, el joven tomó el coche y aceptó la orden de su arrendador de no abrir el remolque, sin saber que se trataba de un espía.

Mientras, en Cabo Kennedy, los militares activaban el Misil que partió en su trayectoria hacia el Océano, pero fue entonces cuando Gorki comenzó su plan, activando el robot el cual activó el rayo desbaratando los controles del arma la cual se dirigió hacia Nueva York. Un arma de tal poder hubiera destruido la ciudad y así hubiera sido de no ser por la intervención de Hulk el cual, después de destruir el robot de Gorki, saltó sobre el Misil Orión dispuesto a destruirlo, por desgracia, en el momento mas inoportuno se produjo la transformación en Banner de modo que Bruce quedó subido al poderoso cohete que se dirigía inexorablemente hacia la ciudad.

Afortunadamente, Banner había sido la persona que había diseñado el Misil Orión y sabía que debía manipular para evitar el terrible desenlace por lo que tras activar manualmente los controles de dirección, el cohete recuperó su trayectoria original yendo a estrellarse contra el mar. Es de suponer que tras comprobar de primera mano el peligro que representaba el Misil Orión, el ejército dejara de fabricarlo.