Bal, Shalla

Shalla Bal era una joven nativa de Zenn La, un planeta a años luz de la Tierra, que mantuvo una relación con Norrin Radd. Cierto día Zenn La se vio amenazada por la llegada de Galactus el Devorador de Mundos, que movido por su necesidad de alimentarse, iba a consumir el planeta, entonces Norrin, para salvar a su pueblo y a su amada, se ofreció convertirse en el nuevo heraldo de Galactus y surcar el espacio para encontrar otros planetas que sirvieran de sustento al Devorador y que no sufrieran inocentes. Galactus aceptó e imbuyó a Norrin del poder cósmico transformándolo en Estela Plateada y ambos abandonaron Zenn La.

Shalla Bal fue testigo de como su amado se sacrificaba por ella y por su planeta, y en los años siguientes conservó el recuerdo de su amado, negándose a olvidarlo o comenzar cualquier otra relación. Cierto día sin embargo, Galactus regresó a Zenn La, todos corrieron asustados intentando ocultarse a excepción de Shalla Bal, que fue a su encuentro con la esperanza de ver a su amado, pero el Devorador de Mundos le informó que Norrin Radd le había traicionado volviéndose contra él, y le había arrebatado el poder cósmico dejándolo exiliado en un planeta a años luz de distancia.

Cuando lo supo, Shalla Bal se ofreció a Galactus como su nueva heraldo, con la esperanza que una vez imbuida con el poder cósmico podría viajar hasta el planeta donde estaba exiliado Norrin para reunirse con él. Pero Galactus pudo leer en la mente de la joven sus intenciones, y tras imbuirle con el poder cósmico convirtiéndola en Starglow, le borró sus recuerdos de modo que cuando Norrin logró regresar a Zenn La por sus propios medios, la joven Zenn Laviana fue incapaz de reconocerlo. Dispuesto a mantener su promesa, Galactus abandonó Zenn La junto a Shalla Bal, siendo esta la última vez que se han tenido noticias de la joven.