Occulus

Según la versión de Sangre Salvaje, en el Introverso existió una vez un par de planetas gemelos que orbitaban el mismo sol, y en la cual vivían dos civilizaciones avanzadas técnica e intelectualmente. Sin embargo, los dirigentes de ambos planetas no previeron el agotamiento de sus recursos naturales, y no hicieron planes para buscar planes alternativos. Con el tiempo, ambos planetas agotaron completamente sus recursos naturales, lo que condujo a un planeta a la guerra contra el otro, a fin de apoderarse de los recursos del otro. El resultado del conflicto fue que uno de los planetas saltó por los aires como consecuencia de una explosión y los restos del planeta destruido formaron un anillo de cristales que rodeó su mundo gemelo. En el planeta superviviente, se abandonaron las antiguas costumbres, y la bonanza tecnológica y científica fue sustituida por las prácticas de los bárbaros.

Un día, se descubrió que una serie de personas del planeta tenían la capacidad de utilizar esos cristales del cielo como fuente de energía (serían como los mutantes de la Tierra), y entonces se creó la Cofradía de la Gema, para encontrar a esas personas e instruirlas en el uso de sus habilidades. Con el paso del tiempo, la influencia de la Cofradía fue tan grande que se convirtieron en los gobernadores del planeta, y una de sus misiones era buscar a todos aquellos que pudieran tener el don. Un día llegó ante la Cofradía un par de huérfanos, y como era costumbre se les sometió a la prueba para ver si poseían el don, uno de los hermanos demostró que no tenía el don, y fue rechazado por la Cofradía, pasando a convertirse en un ladrón y más tarde en el guerrero conocido como Sangre Salvaje. Sin embargo, el otro hermano demostró estar dotado, y la Cofradía lo acogió en su seno enseñándole a utilizar su poder. El niño creció protegido por la Cofradía, y fue ganando cada vez más conocimiento y poder, hasta que llegó el momento de la ceremonia, en la cual se instaba a los Cófrades a hacer un sacrificio que probara su supremacía sobre las gemas, el joven sin pensárselo se arrancó el ojo derecho, y lo sustituyó por una de las gemas. Este acto le valió el respeto de toda la Cofradía, y con el tiempo llegaría a convertirse en su líder, ese hombre era Occulus.

Occulus no tardó en gobernar sobre todo el planeta, estableciendo una tiranía que exigía plena obediencia, se casó con una nativa llamada Landa, y tomó como consejero a un sacerdote de la Cofradía, el malvado Dangor. Durante años, la Cofradía de la Gema, dirigida por Occulus, gobernó en el planeta, dominando a toda la población, la principal ocupación de los nativos era la recolección de las gemas que caían del cielo. Pero pronto surgió un movimiento que tenía como objetivo desalojar a Occulus del poder, este movimiento estaba dirigido por un guerrero de gran valía que resultó ser Sangre Salvaje, hermano del tirano. Occulus envió a su ejército a la caza de Sangre Salvaje, y durante meses el rebelde consiguió esquivar a sus cazadores, pero éstos finalmente lograron cercarlos en las montañas. Cuando iba a ser capturado, del aire se materializó un portal, y por él surgió un largo brazo, y Sangre Salvaje, prefiriendo lo desconocido a ser capturado, se agarró a este brazo, y fue trasladado a la Tierra.

El brazo resultó ser de Reed Richards, que sin saber de la existencia del planeta de Occulus, y en medio de un experimento, había conseguido abrir una puerta entre la Tierra y el Introverso. Sangre Salvaje peleó contra los 4 Fantásticos, y fue finalmente vencerlo, pero cuando iban a interrogarlo, las fuerzas de Occulus atravesaron el portal. Los intrusos consiguieron derrotar al cuarteto terrestre capturaron a Sangre Salvaje, a Susan Richards y a Franklin, y los llevaron a su mundo. Apenas se recuperaron, los restantes miembros de los 4 Fantásticos abrieron el portal y viajaron al Introverso para rescatar a Susan y Franklin.

Mientras, los prisioneros fueron trasladados ante Occulus, que ordenó que se les practicase la prueba para ver si tenían el don, Susan dio negativo, pero al acercar la gema a Franklin, esta se cargó tanto de energía que estalló. En un primer momento, Occulus asustado, intentó matar al niño, pero la Mujer Invisible usó sus poderes para intentar liberarlo, sin embargo Occulus la derrotó, y decidió que mejor que matar al niño, era potenciar sus poderes con una máquina, para después traspasárselos a él. Por su parte, Susan fue liberada por Sangre Salvaje, y mientras este huía a las montañas en busca de sus compañeros rebeldes, donde se encontraría y aliaría con los restantes 4 Fantásticos, Susan iba en busca de su hijo, lo que le llevó a un nuevo combate contra Occulus, y a una nueva derrota, tras esto, Occulus activó su máquina, y absorbió los poderes de Franklin, dejándolo malherido. Ahora, Occulus tenía muchísimo más poder que antes, podía manipular la energía, su fuerza había aumentado más de mil veces, podía volar y controlar campos gravitatorios.

Cuando los restantes 4 Fantásticos y Sangre Salvaje llegaron al palacio de Occulus, y tras liberar a Franklin y a Susan, se enfrentaron a Occulus, el cual los mantuvo a raya con sus nuevos poderes. Viendo que no podían derrotar a Occulus por medios convencionales, Richards se marchó a las colinas acompañado de Susan y de Franklin para poner en práctica un plan que había ideado, mientras que la Antorcha Humana, la Cosa, Sangre Salvaje y los rebeldes luchaban infructuosamente con Occulus. Llegado el momento, la Antorcha Humana atrajo a Occulus hacia las colinas donde les esperaba Mister Fantástico, y allí puso en práctica su plan, un gigantesco panel, construido con miles de gemas cargadas con energía que provocó una reacción por la que Occulus salió disparado en dirección al espacio. Los 4 Fantásticos pudieron entonces regresar a la Tierra dejando aparentemente atrapado a su enemigo.

Sin embargo, Occulus fue rescatado y devuelto a la Tierra por Aron, el Vigilante renegado, que atrajo a diversos enemigos del cuarteto fantástico provenientes de diferentes eras. El villano luchó contra los héroes presentes y sus aliados hasta que Aron fue derrotado, aunque Occulus logró escapar puesto que se le vio posteriormente, siendo capturado nuevamente por los 4 Fantásticos y encerrado en la Bóveda, la prisión para villanos ahora instalada en la Zona Negativa.

La nueva situación de la prisión debía ser una garantía para que los villanos no escaparan, pero fue lo contrario ya que la prisión fue invadida por Threska, una hechicera de la Zona Negativa que liberó a Occulus y a los otros prisioneros, siendo que nuevamente intervinieron los 4 Fantásticos que derrotaron a los villanos, siendo que Occulus fue devuelto a su encierro nuevamente.