Tomlinson

Tomlinson decidió abrir una nueva joyería de lujo en Nueva York, por este motivo se puso en contacto con una agencia de seguros para que se hiciera cargo de la instalación de las alarmas para el nuevo local. Como las fechas de entrega del sistema de seguridad se retrasaron de la fecha prevista y el coste de mantener el negocio cerrado era demasiado alto Tomlinson decidió abrir igualmente. Sin que el lo supiera, Daphne Farvesham, la persona de contacto de la aseguradora estaba compinchada con el ladrón Ojos Nocturnos que desbalijó el negocio llevándose joyas valoradas en más de veinticinco millones de dólares. Atraída por los coches de policía, Spiderwoman se asomó para ver que ocurria y ni corta ni perezosa entró en la joyería ante los atónitos ojos de los policías y Tomlinson. Mientras la chica examinaba todo como si fuera su propia casa mirando si encontraba alguna pista del robo se puso a estornudar, ya que era fuertemente alérgica a los gatos. Tomlison no soportó más la situación y pidió que la echaran, por lo que Miss Farvesham acompañó a la joven heroína hasta la calle {S-W3 14}.