Sienna Blaze

Poco se sabe de la historia de Siena Blaze, salvo que proviene de una de las líneas temporales que visitaba Trevor Fitzroy, por lo que ambos ya se conocían y este último estaba al tanto de las habilidades de Blaze. Fitzroy la incorporó al juego de los Arribistas que consistía en la obtención de puntos por liquidar mutantes cuanto más importantes mejor. Su primera misión fue en la Antártida cuando atacó al Profesor-X, Cíclope y Tormenta. Aunque la Patrulla-X logró vencerla, Siena escapó dejando una muestra de su poder al abrir una gigantesca grieta en la capa polar, cargándola con energía incandescente explosiva.

La siguiente actividad fue al servicio de Mr. Siniestro, cuando viajo a Isla Muir a robar un disco que contenía la información genética del mutante Proteus. Sienna no pudo hacerse con el disco y acabó enfrentándose a Fénix II, gracias a lo cual Siniestro tomó la información genética de Fénix II de debajo de los dedos de la propia Siena. Tras participar con otros miembros de los Arribistas en la cacería de los jóvenes que la involucró en una pelea contra los grupos-X, el grupo se dispersó.

No se supo más de ella hasta que fue seleccionada para ser parte de uno de los grupos de Exiliados que intentaban reparar líneas temporales en el Multiverso. Aunque sufrió el mismo destino que algunos de sus compañeros al ser asesinados por Maxis, Siena Blaze fue resucitada uniendo fuerzas con el Caballero Negro y Segador para lograr regresar a sus realidades. El caballero Negro, Blaze y Segador conseguirían finalmente volver a nuestra realidad.

Blaze fue capturada por mutantes que trabajaban para el nuevo programa Arma-X. Sin que sus captores lo supieran, Blaze fue internada finalmente en el campo de concentración mutante bautizado como Nunca Jamás. Allí, se dejaba a los mutantes indefensos y si eran potencialmente peligrosos para mantenerlos vivos, eran sentenciados a muerte. Siena Blaze, fue uno de los primeros sujetos en ser aniquilados por el programa.