Duane Freeman

Duane Freeman era un funcionario que fue asignado por el Gobierno de los Estados Unidos como enlace de seguridad de dicho gobierno con el grupo de superhumanos conocido como los Vengadores. Los Vengadores habían reaparecido recientemente tras pasar un tiempo en un universo de bolsillo creado por Franklin Richards para salvarles a ellos y a su familia de la muerte tras la batalla contra Onslaught. Cuando regresaron su enemiga Morgana LeFay había trazado un plan para derrotarles que exigió la reunión de todos los miembros disponibles. Tras la batalla el exceso de miembros se convirtió en un problema para el grupo por lo que la primera misión de Freeman como enlace fue intentar reducir el número de miembros hasta una cantidad manejable y configurar una alineación. Para ello, convocó una reunión con los miembros fundadores en la que les sorprendió por su amabilidad y simpatía, lejos de tiránicos antiguos enlaces como Henry Gyrich o Raymond Sikorsky. Freeman llegó incluso a pedir autógrafos a algunos Vengadores, sintiéndose orgulloso y honrado de trabajar con ellos.

Los Vengadores, sin embargo empezaron a recelar de él cuando se descubrió que estaba afiliado al grupo espiritual Comprensión Trina. Los Vengadores sospechaban que en la Comprensión ocultaban algo, ya que, en una ocasión, siguiendo al criminal Lord Templar, sus rastros les condujeron a la sede de la Comprensión, donde no les permitieron entrar. Sin embargo, realmente la Comprensión Trina no estaba corrupta por si misma, tan sólo su líder, Jonathan Tremont y algunos de sus allegados. El propio Tremont, en uno de los rituales de "limpieza de mente" que la Trina realizaba leyó la mente de Freeman y obtuvo datos confidenciales como las frecuencias de radio que los Vengadores utilizaban. Aunque Freeman siguió coordinando a los Vengadores, alertándoles sobre la amenaza de los Ejemplares e investigando sobre ellos, los Vengadores perdieron confianza con Freeman, el cual no se sentía ya integrado en el grupo.

Por si esto fuera poco, Jonathan Tremont, utilizando sus habilidades como manipulador de masas logró crear un sentimiento de odio a los Vengadores entre la opinión pública, que reclamaba más negros y menos mutantes en el equipo. El acoso periodístico llevó al Capitán América a dimitir como líder e incluso a Thor a enfurecerse y atacar a un periodista. Para intentar minimizar esta crisis Freeman exigió a Thor una disculpa pública ante la prensa. Thor se negó, lo que llevó a una disputa entre Freeman y el dios que acabó cuando Thor decidió también abandonar el equipo. Freeman también discutió con Iron Man a propósito de la necesidad de incluir miembros de minorías raciales en el grupo. Iron Man desconfiaba de Freeman por su pertenencia a la Comprensión Trina y le enfureció que Freeman propusiese a Triatlón, el héroe particular de esta asociación, como posible nuevo miembro. Tras una airada discusión Freeman se salió con la suya y el nuevo grupo estuvo integrado por Iron Man, Avispa, Goliath, Hulka, Pájaro de Guerra, Triatlón y Bruja Escarlata. Freeman se sintió satisfecho por la inclusión de un negro y la reducción del número de mutantes a tan sólo uno.

Poco después Freeman tuvo que tomar otra decisión difícil. Durante la crisis que se produjo en la Tierra cuando el Consejo Intergaláctico decidió convertirla en una prisión Freeman y el gobierno decidieron nombrar al USAgente líder provisional de los Vengadores. Una vez la crisis fue resuelta Freeman reestableció la normalidad en el grupo.

Freeman también asesoró a los Vengadores cuando éstos reformaron su estructura hacia una posición más ofensiva, con distintos pequeños grupos de Vengadores distribuidos por el planeta vigilando posibles amenazas. Cuando Kang el Conquistador atacó la Tierra, exigiendo ser su dueño para protegerla de amenazas futuras, Freeman viajó a su despacho en Washinton D.C. para afrontar la crisis junto a sus compañeros del gobierno. Allí, junto a otros altos cargos como Valerie Cooper o Henry Gyrich tomó la decisión de enviar a una nueva horda de Centinelas para atacar la Base Damocles de Kang en el espacio. En su despacho, también, después de resolver gracias a Edwin Jarvis algunas dudas que el gobierno tenía acerca de los Vengadores, Freeman comenzó a redactar una carta de dimisión, sintiéndose culpable por haberle revelado involuntariamente información clasificada a Jonathan Tremont comprometiendo la seguridad de los Vengadores.

Cuando finalmente el gobierno envió a los Centinelas al espacio, Kang los evitó gracias una jugarreta temporal. Kang, en una ocasión, había viajado al pasado bajo el alias de Victor Timely para convertirse en el mayor fabricante de robótica del mundo. Kang había logrado la manera de que la mayor parte de creaciones robóticas actuales se basaran en los robots pioneros que había creado como Victor Timely. Pudo, entonces reprogramar a los Centinelas para que no atacasen su base y, como represalia, Kang asesinó a todas las personas de Washington D.C., entre ellos, Duane Freeman.

Tras su muerte, su hermano Derek confesó a un afligido Iron Man que en el fondo Duane le respetaba. Una foto de Duane acompañada de un dibujo de los Vengadores colocada por Iron Man permanece en el monumento a los caídos erigido en Washington D.C.